domingo, 10 de agosto de 2014

No sobrevivo a un archivo

Admito muy a mi pesar que no sobrevivo a un archivo. Que tonta la idea de creer, hace mucho y no tanto tiempo, que mis tontas ideas ya estaban formadas en su totalidad. Resulta gracioso pensar, aun ahora que estoy por afirmar algo, que antes de hoy podía afirmar algo, o que mañana podré afirmar otra cosa y así. Soy victima de mis propias seguridades y por primera vez en mi vida, lo afirmo sin la certeza de que sea la primera vez, claro está, por primera vez creo que no está tan mal ser inseguro sobre aquello de lo que estamos mas seguros, de nosotros mismos y lo que pensamos. Por que resulta que la vida sigue desde el momento mismo en que con seguridad decimos "yo digo que..." y cuando menos te diste cuenta dejaste de decir eso, o eso dejo de representarte o, aun más, pensás y decís todo lo contrario. Entonces aparece ese que, como pocos como vos, presta demasiada atención a tus verdades a medias y te dice "pero te acordás que antes vos..." y tu discurso paso a ser la contradicción de algún otro discurso guardado en su archivo de memoria, y al parecer no tan guardado, convenientemente o no, en el tuyo. Y entonces ¿sos una persona sin palabra? ¿alguien en quien no se puede confiar? No che, tampoco es para tanto. Pasa lo que pasa siempre, y esto no es nada nuevo en definitiva, pasa que la gente cambia, que la gente crece, que la gente aprende y descubre y evoluciona y todos los sinónimos que se me ocurran, para bien o para mal, según como se vea y etcétera, y ese cambio crea nuevas ideas con nuevos discursos y en fin de cuentas nunca, afirmo esto con poca convicción por que a lo mejor mas adelante diga lo contrario, nunca podemos mantener el mismo discurso. me paso a mí, y lo admito aquí por que es mi manera de que esos monitores de discursos no puedan sacarme en cara que antes decía esto y ahora aquello. Admito aquí y de antemano que no sobrevivo a un archivo, y afirmo, con la misma poca convicción que antes, para no caer en una recursividad, que nadie puede sobrevivir, y que bueno que así sea. Y es bueno por que a la larga nunca vamos a terminar de conocernos, siempre vamos a tener un nuevo tema de conversación, líos existenciales y no tanto nos van a invadir siempre y la vida va a dejar de ser un constante compro-vendo-tengo, para ser un soy-pienso-digo, que se va a modificar, constantemente o no, en mayor o menor medida, y que si estamos atentos nos va a revelar nuevas formas de entender al otro y entender que, como yo, nadie, creo que nadie o tal vez nadie etcétera, nadie puede sobrevivir a un archivo. Solo me resta esperar y ver si en algún tiempo no publico una entrada diciendo "puedo sobrevivir a un archivo".

No hay comentarios:

Publicar un comentario