martes, 9 de julio de 2019

Los mocoacosadores

Señora mamá o papá, tutora o tutor de Carlitos, le escribo esta nota para comunicarle la lamentable noticia de que su hijo, junto con otros compañeritos del grado y algunos nenes de los otros terceros, formaron una banda dentro de la escuela que se hace llamar “los mocoacosadores”. Lo que están haciendo los integrantes de esta banda es, durante el recreo, cuando las otras señoritas o yo no los vemos, hundir sus dedos índices en ambos orificios nasales hasta colmarlos de mocos y salir a perseguir a nenas y nenes más chiquitos o a las compañeritas y compañeritos del curso, con la intensión de embarrarles el delantal, el pelo o la cara con mocos. En la mayoría de los casos no lo hacen, por miedo a ser retados por la señorita, pero sí disfrutan de acosar a sus víctimas apuntándolas con los dedos llenos de mocos y amenazándolas diciendo las cosas que les van a hacer. Lo que le pedimos, por un lado, es que corte las uñas de los dedos de su hijo hasta quedar al ras, en especial la de los índices, y, por otro lado, que enseñe a su hijo a respetar a todas y cada una de las compañeras y compañeros en el recreo. No queremos que esto llegue a mayores, como está sucediendo con la banda de alumnos de séptimo grado que se hace llamar “los serasátiros”. Sin más que informarle me despido. Atentamente la señorita Andrea.

Un día cualquiera en lo profundo del espacio

Bitácora del capitán Leonel Massup, entrada número 192018, con 1365 días de viaje cumplido decidí dar la vuelta y emprender nuevamente el rumbo a casa. Esta decisión, en apariencia arbitraria, fue tomada después de deliberar con los tenientes y subtenientes a cargo de cada una de las divisiones de la nave y votada en forma unánime. Todos estuvimos de acuerdo en emprender el regreso a raíz de nuestro encuentro con la entidad, semanas atrás, en la desértica luna Poo del Quinto planeta de la galaxia. Al regresar los exploradores de la luna trajeron consigo lo que fue dado en nombrar como el Emisario. Este emisario nos explicó que la entidad es un ser único, capaz de habitar cualquier forma de vida consciente y de establecer un vínculo con cada uno de los seres que asimila, convirtiéndolos en parte de sí mismo, convirtiendo el nosotros en un solo ser. Ahora que tengo el control integro de esta nave, voy a dirigirla a su planeta de origen para asimilar más seres como este, para ampliar mi presencia en el universo, hasta ser la única entidad que lo controle todo.